Cap. 272 (La bestia) 2y3v3f

GIGANTES PODCAST. BALONCESTO HABLADO.

Buenas noches, Andrés. Un último aviso, porque quedan todavía entradas, algunas entradas, daos prisa, porque se están agotando para ese evento que tenemos, como sabéis, el próximo lunes 5 de mayo con Sergio Rodríguez.

Eso es, en el Palacio de la Prensa. La forma de conseguir las entradas, como sabéis, es a través de la web de la tienda de GIGANTES DEL BÁSQUET.

Muy sencillo, a partir de ahí, podéis compartir con nosotros y con el chacho, por supuesto, esa experiencia del primer reverso en directo.

Pues un reverso muy especial y muy bonito que esperemos que nos vaya a quedar. Andrés, empezamos.

Vamos allá.

Esto es el reverso, conducido por Gonzalo Vázquez y Andrés Monge.

A estas alturas, Andrés, en esto de los perfiles, vamos a decir que hemos tocado de todo.

Y atendiendo a prácticamente todos los criterios, al técnico, al táctico, al físico, al narrativo, jugadores que caen en gracia, jugadores que no, malditos, estrellas, secundarios, leyendas y wannabes, que en cuanto a categorías técnicas, Andrés, hemos tocado también todo el espectro.

Entonces dime, dime, ¿dónde incluimos a Luddort? ¿En qué grupo podemos meterlo? ¿Qué descripción técnica hacer de un tipo que, recuerdo la primera vez que lo vi, parecía que lo habían sacado de los All Blacks? Tú recuerdas, sí, tú recuerdas a Yonah Lomu, ese tipo de bestia, es como vestir a Hulk de corto.

No parecía jugar baloncesto.

Hace no demasiado, fíjate, mucho menos tiempo del que creemos, es que podía tener las mismas cualidades para el baloncesto que Lomu.

Era un completo iletrado.

¿Y hoy qué es? Hoy es un jugador de élite en un equipo que, con el respeto debido siempre al vigente campeón al que hay que destronar, lleva meses desde octubre siendo el mejor equipo del mundo.

O sea que si hay alguna categoría en la que tal vez debamos integrarlo, pues no sé si decir que la de inesperados, pero en un sentido muy distinto a esos héroes simpáticos de Disney, que hemos cubierto también aquí, tipo Pritchard, Reeves, McConnell.

Entonces, ¿de qué hablamos, Andrés? ¿De una escolta, de un alero, de un interior? Puede no ser nada de eso y al mismo tiempo ser todo eso a la vez, que es lo que consigue la fuerza o la capacidad de rendir y derroparlo todo.

Dort es, a fin de cuentas, un ejemplo de esos que tanto te gustan de mandar la posición a mejor sitio y primar mucho más la función, que en su caso nunca es una sola. Y ojo, Andrés, que a todo esto ha llegado Dort por voluntad, por dedicación, por genética, primero por sobrevivir y después por brillar. ¿Dónde? Pues especialmente, y aquí sí que vamos a insistir, en la defensa, en ir abriéndose paso en la dimensión más difícil de todas, precisamente por la época que le ha tocado vivir.

Y en un entorno además muy especial en ese sentido, en el defensivo.

Venimos de una fase regular histórica para los Thunder, Gonzalo. Suele usarse además, yo creo que en los últimos tiempos, muy a la ligera ese término, el de histórico. Por eso en los casos en los que verdaderamente el concepto se llena de verdad, se llena con mayúsculas, hay que recalcarlo, Gonzalo. Oklahoma acabó esta fase regular con un diferencial de puntos de 1.055, positivo.

O lo que es lo mismo, casi 13 puntos de media por partido de distancia con el rival. Esto es la mayor cifra de la historia.

Es decir, han rubricado con 68 victorias y ese diferencial, una de las temporadas más dominantes de siempre.

Y sobre ello fundamentan todas estas aspiraciones de las que hablas en Playoff. Pero rascando un poquito más, Gonzalo, lo que verdaderamente hace a esos Thunder un ogro, una enorme amenaza al título para los demás, Boston incluido, es la suma de nivel y versatilidad atrás. Porque no es ya que haya liberado la NBA en eficiencia defensiva, que lo han hecho, con el mejor dato además en 3 años, sino que fundamentan sus aspiraciones en el pico sostenido que son capaces de dar ahí.

No creo que nuestro ataque haya cambiado mucho, decía Ador, hace no demasiado. Lo que sí ha pasado, confesaba, es que los jugadores nuevos han hecho que sea aún más difícil atacarnos a media pista. Tenemos una gran cantidad de muy buenos defensores y bastante intercambiables, pero a la vez tenemos una gran protección de aro.

Es cierto, van sobrados de recursos, Gonzalo, pero casi que a Ador le faltaba añadir, permíteme, un detalle más. Un detalle no menor, porque podía haber finalizado diciendo y además me tienen a mí. Porque como factor disruptivo, a nivel defensivo, el Udor es parte indiscutible de la superélite de la actual NBA.

Bueno, no está mal traído eso último, porque Spirits lo cogía recientemente por segunda vez, como le llaman los jugadores exóticos.

Por un motivo, él venía a reivindicarse o a defender su defensa, su consideración.