Sánchez Pérez-Castejón Dimite a41s

La semana pasada, que esto era al gusto del no saber estar y pensábamos que nos quedábamos
ahí con el tema de Inés Hernández enseñando sus partes íntimas, con el tema de Luis Rubiales
dando un beso en un lugar que no procedía, pero esta semana nueva noticia al respecto.
Y lo llamativo de esta semana es que ha sido de mujer a mujer.
Hemos podido ver como en un partido del Barça contra el Español, una futbolista, Mapi
León del Barça, pues tocaba sus partes íntimas a una jugadora del Español.
Y la verdad que han salido diferentes justificaciones y excusas en las que Mapi León decía que
no le tocaba sus partes íntimas, que le tocaba la pierna, que ante las acusaciones de que
había dicho tienes picha, ella decía que no, que no había sido el caso, que había
dicho tienes queja o no sé qué otro término había utilizado, intentando excusarse y justificar
un poco esa manera de actuar.
Sin embargo, hay gran parte del sector futbolero y gran parte de la población española que
dice que claramente se ve cómo toca la entrepierna, que claramente se ve cómo vocaliza diciendo
tienes picha en un acto de acoso hacia la otra jugadora.
Yo no voy a entrar a debatir si esto ha sido una agresión o no ha sido una agresión, porque
creo que eso es algo que deben decidir los tribunales, es algo que deben decidir los
jueces y es algo que las pruebas deberán demostrar o dejar de demostrar.
Pero sí que me veo en la obligación de señalar, de apuntar y de llamar la atención a esta
doble vara de medir que siempre tiene la izquierda, esta doble vara de medir que tiene siempre
el Ministerio de Igualdad y esta doble vara de medir que hemos visto siempre en el Partido
Socialista, en Podemos, en Sumar y en personajes como son Irene Montero.
Entonces yo me pregunto, hemos criticado muchísimo a Luis Rubiales, hemos criticado muchísimo
ese gesto, ese beso que le da a Jennifer Hermoso, yo la primera en criticarlo, porque me parece
obsceno, feo, fuera de lugar, carente de modales, soez, de acuerdo.
Pero de ahí al delito hay un gran paso.
Y ahora en cambio en esta situación, ¿por qué no señalan con tanta dureza a esta futbolista
Mapileon? ¿Por qué la izquierda está dejando pasar el asunto? ¿Por qué la izquierda no
está en todos los medios de comunicación criticándola, haciendo juicios de valor,
creyéndose jueces y tribunales? ¿Por qué no lo están haciendo en este caso? ¿Qué
diferencia hay? Porque si aquí eliminamos los sexos de cada uno, me parece mucho más
grave el gesto de Mapileon que el de Luis Rubiales. Mucho más grave, porque se ha tocado una
parte íntima. Y le está ofendiendo, haciéndole pensar, dudar o atacándola sobre si pertenece
a otro sexo. Si es el caso, que yo no estoy entrando a debatir si es lo que ha dicho o no.
Estoy diciendo, en el caso de que eso haya sido así, de que se demuestre que en efecto
eso ocurrió, ¿por qué la izquierda no lo está atacando? Además que ya sabemos que
la izquierda, lo que es la presunción de inocencia, siempre la abandona y la deja por
el camino, incluso con los suyos propios. ¿Por qué en este caso sí que protege la
presunción de inocencia? ¿Porque se trata de una mujer? ¿Porque se trata de una mujer
homosexual? ¿Cuál es el motivo que hay detrás? Porque yo he estado hablando ahora de medir
y esta incongruencia, esta incoherencia, esta inconsistencia por parte de la izquierda,
por parte del Partido Socialista, por parte de Sumar, por parte de Podemos y por parte
de cualquier institución que esté, como siempre, eclipsada, manchada y contaminada
por la izquierda, no lo comprendo. Y no me parece justo. No me parece justo ni con las
mujeres, ni con los hombres, ni con los heterosexuales, ni con los homosexuales, ni con Luis Rubiales,
ni con el fútbol, ni con los espectadores, ni con la población en general. Me parece
una tomadura de pelo, una vez más, y confiaré, aunque lo cierto es que no, en que la izquierda
una vez por todas abandone esta inconsistencia de su argumentario y de una vez por todas
se lance a hablar y condene, o a todos por igual, o no condene a nadie. Pero sí a la
izquierda.