Las Verdaderas Riquezas (Parte II), Sabiduría 6c4o5

Iglesia de Cristo Capernaum Chimaltenango del Ministerio de Sadomiser Guatemala te da la bienvenida al podcast del Pastor Luis García.

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Oramos y así entramos en el tema. Padre, muchas gracias, Señor, por bendecirnos al salvarnos y darnos el privilegio, en nuestro caso, Señor, de militar en esta nación donde hay tanta libertad.

Para buscarte, para servirte, rogamos por aquellos, Señor, en donde se encuentren, incluso, como dice Tu Palabra, Señor, aquel siervo que estaba ahí mismo, donde en su momento estaba el trono de Satanás, pero no dejó de hacerlo, sino valientemente lo hizo también.

Rogamos entonces nosotros por aquellos hermanos que tal vez tienen esa dificultad y aún de congregarse.

Sin embargo, Señor, nosotros estando aquí en Tu Casa, en esta localidad, Chimaltenango, te rogamos, Señor, que por favor nos hables.

Apreciamos, Señor, Tu buena palabra.

Por favor, envíala en el nombre de Jesús y ayúdanos a que seamos esa tierra fértil para que dé fruto al ciento por uno.

En el nombre de Jesús, gracias, Señor.

Amén y Amén.

Bueno, yo le decía, quisiera abordar una segunda parte de este tema que le hemos llamado Verdaderas Riquezas.

Esto el Señor, pues, me permite estudiarlo e irlo compartiendo, partiendo de un tema que nuestro apóstol dio dentro del equipamiento que tuvimos allá en el Retiro de México con mi esposa y unos hermanos que nos acompañaron, de este esquema que nuestro apóstol hizo.

Para mí es una de tantas minas valiosas que tiene la palabra que nuestro apóstol le pegó un piochazo allá en el Retiro de México.

Ah, perdón, solo ya asumí como salud en la mañana y me reporté.

Pues, para los que no estuvieron, Dios les bendiga.

Bueno, verlos.

Bueno, véanlo, hermano.

No estuvimos con mi esposa la semana pasada porque fuimos al equipamiento y también, pues, a atender a una familia que está allá con el aval, obviamente, de nuestro apóstol.

Y bendito Dios, en esa visita que hicimos, bendito el Señor.

Vamos a ver, reconciliaron dos personas con el Señor, aceptaron dos niños al Señor y se bautizaron tres.

Gracias a Dios.

Démosle un aplauso al Rey bendito.

Aleluya.

Entonces, le decía que estuvimos en este equipamiento.

Nuestro apóstol le pegó el piochazo a esa mina preciosa y habló referente a las riquezas verdaderas.

Quisiera recoger algunas espigas que estuvimos hoy disfrutándonos en el culto de la mañana para que todos nos ubiquemos.

Creo que el Señor nos pondrá a seguir escudrillando.

Son por lo menos 16 riquezas, probablemente hay más descritas en la palabra.

Pero iremos poco a poco.

Colosenses 1.26 y 27.

Este mensaje se mantuvo en secreto durante siglos y generaciones, pero ahora se dio a conocer al pueblo de Dios.

Pues Él quería que su pueblo supiera que las riquezas y la gloria de Cristo también son para ustedes.

Aleluya.

Usted se goza hermano.

Dios quiere que sepamos nosotros que las riquezas y la gloria de Cristo también son para nosotros.

Los gentiles.

Y el secreto es, Cristo vive en ustedes.

Eso les da la seguridad de que participarán de su gloria y también intrínsecamente acá, diría yo, de sus riquezas en gloria.

La palabra de Dios nos enseña que como que la llave, decía nuestro apóstol Sergio, para que se abran todas las riquezas, es la forma sabia de istrar lo que vemos.